Arrancó un año que vendrá cargado de definiciones, con elecciones anticipadas y en la Ciudad tal vez sorprendan nuevas alianzas que no son las que están en marcha.
Jorge Macri ya movió su ficha convocando a elecciones en una fecha separada de los comicios nacionales, el 6 de julio, cuando se vote solamente por treinta legisladores porteños y la jugada más importante estará en la elección a senadores nacionales por la Ciudad de Buenos Aires, que se elegirán junto con los diputados nacionales por el distrito.
De esa manera queda claro que la elección, en realidad es local. Cada provincia define su fecha y no habrá un mismo candidato para todo el territorio porque no se definen cargos ejecutivos, como el de Presidente y vice, turno que será en el 2027.
Mientras tanto, Jorge Macri prometió un proyecto de ley para "suspender" las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) que deberá tratar la Legislatura en sesiones extraordinarias.
Para cambiar el Código Electoral, se requieren 40 votos en la Legislatura porteña, es decir dos tercios del recinto, que el PRO no tiene.
Se anticipa un debate tenso entre el oficialismo porteño y La Libertad Avanza (LLA) que por un lado pretenden ser socios políticos pero por otro se contradicen. Es el caso de las PASO que los libertarios quieren directamente elimar. Aunque Jorge Macri cediera en ese sentido, no tendría los votos para su aprobación.
El peronismo por estas horas resulta aliado del oficialismo en la Ciudad, para aportar los votos que permitan reunir los dos tercios, siempre y cuando también vote la UCR, de lo contrario los números no cierran.
Sin embargo la UCR y Unión por la Patria no aportarían sus votos para el proyecto de "eliminar" las PASO que creen debe tener un debate más profundo.
Así se va conociendo la estrategia del macrismo para blindar la Ciudad y evitar el avance de los libertarios.