Alberto Fernández despegó al AMBA de la zona más roja del país y Larreta se aferró a su Plan Integral de Puesta en Marcha de la Ciudad que va por el tercero de los seis pasos que contemplan las habilitaciones de distintas actividades. Ya comenzaron a funcionar actividades educativas para alguno escolares y al aire libre.
"Ya está todo acordado", aseguraron desde el Gobierno de la Ciudad, tras la reunión que mantuvieron en la Casa Rosada funcionarios porteños con nacionales. Participaron el jefe de Gabinete de Larreta, Felipe Miguel y el titular de Transporte, Juan José Méndez, con la secretaria Legal y Técnica de la Nación, Vilma Ibarra. El gerente general de la Cámara Argentina de Shoppings Centers, Mario Nirenberg, también aseguró ayer que "hay un acuerdo" entre los Gobiernos nacional y porteño para permitir, hoy mismo, la reapertura de los centros comerciales. Sin embargo es necesaria la firma del decreto correspondiente por parte de Alberto Fernández. Desde la Ciudad, inclusive, aseguran que todavía no está formalizada la actividad del personal de casas particulares ni de parte de la construcción.
"Hoy tenemos la buena noticia de que a las 12 de mañana (por hoy) vamos a tener nuevamente los shopping abiertos", dijo Nirenberg ayer ante las radios pero indicó que "falta la decisión de la Jefatura de Gabinete de Nación, pero sabemos que ya hay acuerdo entre la Nación y la Ciudad".
En la apertura de los centros de compras no funcionarán las zonas de patio de comidas, ni los cines , ni los patios de juegos infantiles.
"Los shopping no somos un vector de contagio, estamos en condiciones de ejercer nuestra actividad en las mejores condiciones de seguridad", destacó el empresario.
En principio se permitirá el acceso al público, en los centros comerciales, de modo que se calcule una medida de una persona cada 15m2. Para ese cálculo se tendrá en cuenta la superficie que ocupan los locales comerciales de cada uno de los 15 shoppings de la Ciudad.A tal fin deberá tenerse en cuenta sólo la superficie destinada a los locales comerciales.
La idea es que se controlen los ingresos y egresos de los consumidores con sistemas electrónicos, ya que la Ciudad busca evitar aglomeraciones y que se respete el distanciamiento social preventivo.
Por otra parte, el proyecto de la Ciudad contempla que los clientes no vayan acompañados y que la atención sea rápida.
El protocolo porteño señala que se disponga de alcohol en gel y sanitizantes en los accesos a los Centros Comerciales y que en el interior del edificio se coloque cartelería visible con información actualizada sobre métodos de prevención para el COVID- 19, como también una señalización en los lugares de espera para que se mantenga la distancia de 2 metros.
" Siempre que sea posible se aislará al trabajador de las personas externas al establecimiento. Asimismo, de ser posible, se colocarán mamparas, pantallas o elementos de distanciamiento en los escritorios de las oficinas de atención al público para separar al/los trabajador/es del público en general", dispone el protocolo de la Ciudad, entre otras recomendaciones como la de reforzar la higiene en los sanitarios y que solo funcionen locales de comida que puedan dar atención al aire libre.