Horacio Rodriguez Larreta apuesta a una baja en la cantidad de contagios diarios por coronavirus, un impacto que, como producto de las aperturas de esta semana y la próxima, se mostrará en el conteo dentro de unos diez días aproximadamente. El Gobierno porteño suele evaluar como número más preciso el que se presenta a partir de los martes, ya que considera que el producido los fines de semana no son los que reflejan un promedio luego.
La apuesta más arriesgada parece ahora la apertura de escuelas aunque serán con turno y protocolos para niños que no pudieron conectarse en forma virtual para recibir enseñanza durante el aislamiento, que ya tiene inclusive reacción de los gremios docentes pero que se comenzará a implementar a partir del 31 de agosto próximo cuando ya haya finalizado la presente fase de cuarentena. Es decir abarcará otra etapa del asilamiento que por ahora se computa en simultáneo con las habilitaciones de actividades comerciales en la Ciudad de Buenos Aires.
Hoy comienza el funcionamiento de locales comerciales con venta minorista y mayorista de la avenida Avellaneda en el barrio porteño de Flores. Estos negocios no están obligados como los de Once que se rehabilitaron el martes pasado, a funcionar de acuerdo a la terminación del CUIT, ya que son menos cantidad de locales, según explicó el Gobierno porteño. De esa manera abrirán todos los días de 11 a 21, no día por medio, pero se mantendrá la restricción para los clientes de poder ir a comprar de acuerdo a la terminación de su número de Documento Nacional de Identidad, aunque en la práctica no habría mucho control sobre ese detalle.
A partir del lunes próximo, se sumarán a las excepciones del aislamiento la apertura de locales comerciales de los centros de transbordo ubicados en la terminal de trenes de Retiro, en Liniers y en Constitución, zonas de alto tránsito en tiempos anteriores a la pandemia pero que sigue concentrando público como lugar de trasbordo de trenes, subtes y colectivos. También estará vigente ahí la regla del número de DNI para atender los días pares a los terminados en par y los impares a los terminados en impar y el horario de 11 a 21 para funcionar.
La novedad en el plan de apertura de Larreta es la habilitación para el funcionamiento de hoteles aunque no lo será para fines turísticos sino para pasajeros que lo requieran por cuestiones laborales o tratamientos médicos. La Ciudad calcula que solamente estarían en condiciones de ofrecer sus servicios de 50 a 100 establecimientos de los más de 500 que hay en el distrito.
"Es para atender necesidades específicas de alojamiento como un tratamiento médico o para empresas que lo necesitan para sus empleados", indicó el Gobierno porteño y remarcó que solamente estarán habilitadas las habilitaciones y que no se permite el uso de espacios comunes.
También insistieron los funcionarios con que, para alojarse se deberá contar con el permiso de circulación.
Ayer, el Gobierno porteño destacó la concurrencia a los espacios deportivos que comenzaron a funcionar esta semana, entre ellos el complejo deportivo Manuel Belgrano, más conocido como KDT, ubicado en Avenida Costanera y Salguero, donde se puede practicar tenis y ciclismo.“Esto no es solamente regresar a la actividad en sí, sino recuperar la fuente de trabajo para mucha gente que vive del deporte. También es importante para que los clubes puedan volver a abrir sus puertas y reactivar su economía”, dijo el Director General de Deporte Social y Desarrollo Deportivo de la Ciudad, Carlos Alberto Yoshida.