El bloque oficialista Vamos Juntos, con diferencias internas y ayuda del radicalismo sumó los votos para la sanción por parte de la Legislatura porteña, de la reforma al Código Contravencional que prohíbe la actividad de "trapitos" y limpiavidrios, con penas agravadas para eventuales organizadores de los cuidacoches en ocasiones de actos de concurrencia masica.
Así, Horacio Rodriguez Larreta superó los votos necesarios para aprobar la reforma Para conseguir la sanción de la norma, que le fue rechazada unas seis veces a Mauricio Macri durante su gestión porteña, el oficialismo debió aceptar que de la bancada Vamos Juntos, los aliados de Elisa Carrió no sumaran sus votos contra los “trapitos”. A cambio concilió con el bloque Evolución que se referencia con Martín Lousteau, cambios en el proyecto original que envió Horacio Rodríguez Larreta y el
borrador del socialismo que también aportó a la redacción de la norma. Entre otras diferencias, que ya anticipó este diario, se quitó la posibilidad de recibir denuncias en forma anónima y además, en relación a los cuidacoches se exceptúa de la contravención a quienes cuenten con un permiso para esa tarea. La idea, señalaron, es dejar en claro que se castiga “la apropiación del espacio público”.
De esa manera la reforma obtuvo 40 votos positivos en su votación en general, de los 60 del recinto, y fue variando en menos en la votación en particular, mientras que el kirchnerismo rechazó la norma y el Partido Socialista apoyó la prohibición de trapitos y limpiavidrios. La contravención tendrá multas y realización tareas de utilidad pública, pero podrá arrestarse a los jefes o coordinadores de bandas, como también castigar con multas a organizadores de espectáculos cuando tengan complicidad con ese sistema ilegal de estacionamiento.
Las modificaciones sobre el proyecto de Larreta fueron varias, al punto que se terminaron de acordar ayer en el recinto, en la última sesión ordinaria del año. El radical Leandro Halperín (Evolución) propuso durante