Preocupa al PRO voto de mayores
Por: Patricia García en Ambito Financiero
QUE SE RESISTEN A ESTRENAR URNAS ELECTRÓNICAS. TAMBIÉN RIVALES RECIBEN QUEJAS. LOUSTEAU, MÁS VOTADO POR JÓVENES
Un trabajo de campaña política intenso en los centros de jubilados de la Ciudad de Buenos Aires captura al macrismo en las últimas horas hacia la elección del próximo domingo para renovar la Jefatura porteña, legisladores y comuneros. Es que el estreno del voto electrónico desalienta a los mayores, especialmente a quienessuperan la edad para el sufragio obligatorio y una porción importante de esa franja simpatiza con el PRO.También en las otras agrupaciones políticas reciben quejas de jubilados que no se animarían a practicar con una máquina para votar, cuando muchas veces presentan dificultades para operar los cajeros automáticos.
El macrismo ya sabe que la mayor porción de los que superan los 60 años son votantes del PRO. Para más, un sondeo que manejan les asegura que el candidato a la sucesión de Mauricio Macri, Horacio Rodríguez Larreta, se lleva más del 60% de la intención de voto entre los adultos mayores.
El despliegue de simuladores en las calles porteñas y en locales diversos tranquiliza al PRO, que asegura que una vez que los vecinos prueban cómo será el sufragio lo consideran sencillo para el debut.
En el kirchnerismo también persiste esa duda, en un padrón donde suelen concurrir a los comicios los mayores aún no incluidos en la obligatoriedad.
Sin embargo, en el combo ECO que presenta al exministro Martín Lousteau como candidato a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires no es alarmante si hubiera una baja concurrencia de adultos mayores el día de la elección. Es que es el público joven donde encuentra mejores chances el economista, de acuerdo con estudios en ese sentido. Para Lousteau se sumarían más del 30% de los votos de jóvenes menores de 21 años, mientras el candidato del Frente para la Victoria, Mariano Recalde, cosecha en la franja de 21 a 25 años, en ventaja con sus rivales.
Como sea, el PRO alienta a los jubilados a participar de las urnas electrónicas y les asegura además que habrá en cada escuela una máquina para ensayar antes de recibir la boleta que saldrá impresa una vez que el elector marque sus opciones.
Además ya está previsto que la celeridad que le atribuyen al nuevo mecanismo se dará quizás en el momento del escrutinio provisorio, pero no para emitir el voto, al punto que ya el Tribunal Superior de Justicia porteño estudia la posibilidad de prolongar el habitual horario de 8 a 18 para la votación. Creen que por ser la primera vez que los porteños utilizarán las máquinas se podría demorar más que con el uso de las papeletas tradicionales.
Mientras tanto, el Tribunal Superior de Justicia recordó que estará prohibido tomar fotos, filmar o utilizar el teléfono celular mientras el elector esté utilizando la máquina de votación.
El viernes comienza la veda y el sábado se iniciará un operativo a cargo del Gobierno porteño para que se instalen las máquinas en las escuelas y participen capacitadores alentando a los vecinos a acercarse para ensayar el voto antes de la elección del domingo.
El macrismo ya sabe que la mayor porción de los que superan los 60 años son votantes del PRO. Para más, un sondeo que manejan les asegura que el candidato a la sucesión de Mauricio Macri, Horacio Rodríguez Larreta, se lleva más del 60% de la intención de voto entre los adultos mayores.
El despliegue de simuladores en las calles porteñas y en locales diversos tranquiliza al PRO, que asegura que una vez que los vecinos prueban cómo será el sufragio lo consideran sencillo para el debut.
En el kirchnerismo también persiste esa duda, en un padrón donde suelen concurrir a los comicios los mayores aún no incluidos en la obligatoriedad.
Sin embargo, en el combo ECO que presenta al exministro Martín Lousteau como candidato a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires no es alarmante si hubiera una baja concurrencia de adultos mayores el día de la elección. Es que es el público joven donde encuentra mejores chances el economista, de acuerdo con estudios en ese sentido. Para Lousteau se sumarían más del 30% de los votos de jóvenes menores de 21 años, mientras el candidato del Frente para la Victoria, Mariano Recalde, cosecha en la franja de 21 a 25 años, en ventaja con sus rivales.
Como sea, el PRO alienta a los jubilados a participar de las urnas electrónicas y les asegura además que habrá en cada escuela una máquina para ensayar antes de recibir la boleta que saldrá impresa una vez que el elector marque sus opciones.
Además ya está previsto que la celeridad que le atribuyen al nuevo mecanismo se dará quizás en el momento del escrutinio provisorio, pero no para emitir el voto, al punto que ya el Tribunal Superior de Justicia porteño estudia la posibilidad de prolongar el habitual horario de 8 a 18 para la votación. Creen que por ser la primera vez que los porteños utilizarán las máquinas se podría demorar más que con el uso de las papeletas tradicionales.
Mientras tanto, el Tribunal Superior de Justicia recordó que estará prohibido tomar fotos, filmar o utilizar el teléfono celular mientras el elector esté utilizando la máquina de votación.
El viernes comienza la veda y el sábado se iniciará un operativo a cargo del Gobierno porteño para que se instalen las máquinas en las escuelas y participen capacitadores alentando a los vecinos a acercarse para ensayar el voto antes de la elección del domingo.