Clases a fiscales porteños, con desconfianza a urna electrónica
Por: Patricia García para Ambito Financiero
La máquina estará frente a las autoridades de mesa y fiscales, pero el frente sólo se dispondrá mirando al elector, es decir, se vota en público, pero privadamente. Esa disposición apuntará a evitar algún tipo de eventuales ataques al sistema que pudieran ocurrir, y a la vez, sostienen que así el votante con dudas de cómo emitir sus preferencias puede consultar.
Como se viene difundiendo, la boleta de papel contendrá un chip en el que se grabará el voto y coincidirá con lo que saldrá impreso antes que el sufragante lo coloque en la urna.
Para el escrutinio provisorio se hará valer lo que lea la máquina del chip. Como sea, el candidato K, Mariano Recalde, aseguró a este diario: "Nuestros fiscales tienen orden de contar los votos a mano", no sea cosa que pudiera haber diferencia. Por cierto, la autoridad de mesa debe leer el voto antes de apoyar la boleta para el recuento electrónico.
También el combo ECO, que lleva de candidato a jefe porteño a Martín Lousteau, estará atento a la fiscalización después de haber hecho varios pedidos y observaciones sobre el mecanismo que no fueron contemplados por la Justicia electoral.
Es que de acuerdo con la auditoría que terminó la semana pasada la UBA (Facultad de Ciencias Exactas), "la lectura del contenido de la boleta podría violar el secreto del voto si la lectura se logra antes de meter la boleta en la urna de modo tal de saber cuál es el elector que votó con esa boleta". Entonces, los expertos explican que eso puede ocurrir "apoyando un celular moderno de tipo smartphone" que tenga un software específico, pero aseguran que tiene que ser a corta distancia y entonces lo podrían ver las autoridades de mesa presentes. De allí, la advertencia del tribunal. También se podría saber por quién votó el elector "usando una antena especial con un dispositivo que lea la máquina en el momento en que se está realizando la grabación del chip". Para evitar que alguien coloque una antena, que debe ser de varias decenas de centímetros, se aconsejó tomar recaudos para verificar que nada de eso suceda.
Siguiendo los resultados de los auditores , "la máquina de votación tiene una serie de puntos débiles en relación con la falta de control de los dispositivos internos", pero los expertos indican que habría que cambiar el DVD que tiene cada máquina con el software y que ante la mirada de fiscales y autoridades comiciales, esto sería imposible.
Entre otras recomendaciones, los técnicos indican que "el presidente de mesa debe también velar por la ausencia de elementos extraños al acto eleccionario en la mesa" y que "los fiscales no deberían tener elementos más allá de los indispensables para cumplir con su tarea y, si bien pueden tener un teléfono celular, no deberían estar usándolo todo el tiempo ni hacer actividades extrañas con el mismo". También imponen que fiscales y electores no usen las cámaras del celular.
En ECO ya difundieron consignas a sus fiscales en ese sentido remarcando "solicitar cantar en alto los votos antes de pasar por el lector".
El PRO imprimió un manual para sus fiscales con todas las novedades del voto electrónico identificado como BUE (Boleta Única Electrónica), pero reforzó el momento de apertura y cierre de los comicios.
Para el macrismo, que aspira a que Horacio Rodríguez Larreta gane la elección por gran diferencia entre sus rivales, el mecanismo acelerará el escrutinio y permitirá aliviar incluso la fiscalización.
El elector, por su parte, deberá saber que nadie debe tocar la BUE una vez impresa (excepto el votante, claro) y darles a las autoridades de mesa la mitad del troquel que coincidirá con la que fue quitada en el momento en que se le entregó la boleta en blanco.
TRAS REVELAR AUDITORÍA POSIBILIDAD DE ATAQUES A SISTEMA. DESAPARECE CUARTO OSCURO Y PROHÍBEN USO DE CELULARES
El macrismo aparece como el más confiado en el debut del voto electrónico, mientras que las otras agrupaciones que competirán el domingo en las elecciones porteñas comenzaron a tomar sus recaudos para la fiscalización de los novedosos comicios y de acuerdo con un informe de auditoría de la UBA, que si bien da por seguro el sistema, hace algunas advertencias. A pesar de considerarlas menores, el elector tal vez se sorprenda con dos novedades importantes en la forma habitual de votar, como que no habrá cuarto oscuro y no se permitirá el uso de aparatos electrónicos, porque podrían, entre otras cuestiones, desnudar el secreto del sufragio.
El Tribunal Superior de Justicia porteño, en el instructivo para los presidentes de mesa, advierte con letras mayúsculas para empezar las recomendaciones: "Haga respetar la prohibición de tomar fotos, filmar o utilizar el teléfono celular mientras un elector esté utilizando la máquina" y "nunca pierda de vista la urna ni la máquina".
El Tribunal Superior de Justicia porteño, en el instructivo para los presidentes de mesa, advierte con letras mayúsculas para empezar las recomendaciones: "Haga respetar la prohibición de tomar fotos, filmar o utilizar el teléfono celular mientras un elector esté utilizando la máquina" y "nunca pierda de vista la urna ni la máquina".
La máquina estará frente a las autoridades de mesa y fiscales, pero el frente sólo se dispondrá mirando al elector, es decir, se vota en público, pero privadamente. Esa disposición apuntará a evitar algún tipo de eventuales ataques al sistema que pudieran ocurrir, y a la vez, sostienen que así el votante con dudas de cómo emitir sus preferencias puede consultar.
Como se viene difundiendo, la boleta de papel contendrá un chip en el que se grabará el voto y coincidirá con lo que saldrá impreso antes que el sufragante lo coloque en la urna.
Para el escrutinio provisorio se hará valer lo que lea la máquina del chip. Como sea, el candidato K, Mariano Recalde, aseguró a este diario: "Nuestros fiscales tienen orden de contar los votos a mano", no sea cosa que pudiera haber diferencia. Por cierto, la autoridad de mesa debe leer el voto antes de apoyar la boleta para el recuento electrónico.
También el combo ECO, que lleva de candidato a jefe porteño a Martín Lousteau, estará atento a la fiscalización después de haber hecho varios pedidos y observaciones sobre el mecanismo que no fueron contemplados por la Justicia electoral.
Es que de acuerdo con la auditoría que terminó la semana pasada la UBA (Facultad de Ciencias Exactas), "la lectura del contenido de la boleta podría violar el secreto del voto si la lectura se logra antes de meter la boleta en la urna de modo tal de saber cuál es el elector que votó con esa boleta". Entonces, los expertos explican que eso puede ocurrir "apoyando un celular moderno de tipo smartphone" que tenga un software específico, pero aseguran que tiene que ser a corta distancia y entonces lo podrían ver las autoridades de mesa presentes. De allí, la advertencia del tribunal. También se podría saber por quién votó el elector "usando una antena especial con un dispositivo que lea la máquina en el momento en que se está realizando la grabación del chip". Para evitar que alguien coloque una antena, que debe ser de varias decenas de centímetros, se aconsejó tomar recaudos para verificar que nada de eso suceda.
Siguiendo los resultados de los auditores , "la máquina de votación tiene una serie de puntos débiles en relación con la falta de control de los dispositivos internos", pero los expertos indican que habría que cambiar el DVD que tiene cada máquina con el software y que ante la mirada de fiscales y autoridades comiciales, esto sería imposible.
Entre otras recomendaciones, los técnicos indican que "el presidente de mesa debe también velar por la ausencia de elementos extraños al acto eleccionario en la mesa" y que "los fiscales no deberían tener elementos más allá de los indispensables para cumplir con su tarea y, si bien pueden tener un teléfono celular, no deberían estar usándolo todo el tiempo ni hacer actividades extrañas con el mismo". También imponen que fiscales y electores no usen las cámaras del celular.
En ECO ya difundieron consignas a sus fiscales en ese sentido remarcando "solicitar cantar en alto los votos antes de pasar por el lector".
El PRO imprimió un manual para sus fiscales con todas las novedades del voto electrónico identificado como BUE (Boleta Única Electrónica), pero reforzó el momento de apertura y cierre de los comicios.
Para el macrismo, que aspira a que Horacio Rodríguez Larreta gane la elección por gran diferencia entre sus rivales, el mecanismo acelerará el escrutinio y permitirá aliviar incluso la fiscalización.
El elector, por su parte, deberá saber que nadie debe tocar la BUE una vez impresa (excepto el votante, claro) y darles a las autoridades de mesa la mitad del troquel que coincidirá con la que fue quitada en el momento en que se le entregó la boleta en blanco.