Artículo 50 de la Constitución de la Ciudad de Buenos Aires
Mauricio Macri coronó con la sanción de una ley el pacto con el gobierno nacional que beneficia a empresarios del juegos, donde tanto el jefe de gobierno tiene un amigo, como también el kirchnerismo.
La Ciudad recibirá algo más de dinero por esa actividad, pero saldrá de Lotería Nacional y una cantidad menor de un canon voluntario sobre la ganancia de los casinos flotantes, el hipódromo y las tragamonedas.
El acuerdo se refrendó en la Legislatura porteña, en menos de veinte minutos y sin chistar, con votos del PRO y del Kircherismo y se trata de eximir de impuestos
actuales y futuros sobre el juego.
La modificación del convenio celebraro por primera vez en 2003, avanza sobre el mandato de la Constitución porteña. Incluye un canon del 3% a los casinos, las tragamonedas y el hipódromo, como contribución que se calculará sobre las ganancias de esos juegos y cambió el mecanismo de liquidación del porcentaje que recibe la Ciudad de Buenos Aires, que hasta ahora era sobre lo que recibe Lotería pero descontado el monto que se remite al área de Desarrollo Social.
"La percepción de la referida alícuota supondrá Ia extinción de las pretensiones o créditos vinculados con el pago del lmpuesto a los lngresos Brutos o cualquier otra tributación específica sobre las concretas actividades de juego desarrolladas por este operador como brazo extendido de Lotería Nacional", señala el acuerdo. Por las dudas, además otro artículo impone que "el operador se reserva en forma irrenunciable e irrevocable el derecho de dejar sin efecto e interrumpir automáticamente el pago de dicho canon especial suplementario" si el Gobierno porteño "pretendiera reclamar" el pago del lmpuesto sobre los lngresos Brutos, "o si de cualquier forma pretendiera gravar con cualquier otro impuesto, tasa o contribución la actividad de juegos de azar desarrollada en el casino que opera en buques fondeados en aguas del Río de la Plata; o bien, llevara adelante acciones que perjudiquen la operación de juegos o atenten contra su continuidad".
A partir del nuevo convenio, se liquidará en partes iguales antes de hacer ese descuento. Según los cálculos del Gobierno porteño, la Ciudad recibiría unos $ 300 millones más que lo que percibe actualmente, pero según la Coalición Cívica, estaría resignando $ 1.000 millones al no cobrar impuestos.
