Ya tiene tope suba de impuesto porteño 2014
Por: Patricia Garcíapara Ambito Financiero
Se votó ayer ley PRO que permite hasta 40% de aumento para casas más caras
La campaña electoral en la Ciudad de Buenos Aires comenzó con un alivio para los vecinos, tras sancionarse ayer una ley que les pone tope a los aumentos del impuesto inmobiliario que los contribuyentes abonan con las tasas de Alumbrado, Barrido y Limpieza.
El PRO consiguió adhesiones para esa norma y también tuvo, en la sesión ordinaria de la Legislatura porteña, los votos justos para el pedido de ampliación presupuestaria que formuló Mauricio Macri por más de $ 7.000 millones.
El freno a la suba del ABL es para 2014 y el PRO lo impulsó para evitar un trago amargo durante la temporada electoral, ya que los cálculos se realizan este año, y además una baja de adherentes en el preludio de las elecciones presidenciales de 2015. En el ejercicio anterior hubo fuertes críticas al impuestazo del Gobierno porteño, que llevó las boletas de ABL al doble en muchos casos.
Aumentos habrá igual, pero las propiedades más caras no pagarán una suba superior al 40% de acuerdo con la ley.
En la Ciudad rige desde 2011 una norma que actualiza cada año automáticamente el ABL con el propósito de llevar la base imponible, que es la valuación fiscal, hasta el 80% del precio de mercado de la propiedad.
Si la ley se aplicaba como está previsto, las subas serían del 50%, 75% y 100% según el valor de la propiedad, pero ahora se frenarán al 20%, el 30% y el 40%, según la valuación sea de $ 150 mil para el primer tramo, $ 300 mil para el segundo y para el tercero las que superen ese valor. La norma contó con 47 votos positivos.
En cambio, el macrismo llegó a reunir apenas lo justo, 30 votos, que significaron mayoría para otorgarle a Macri más presupuesto con recursos de la coparticipación y de mayor recaudación. El PRO contó con la adhesión en el recinto deAlejandro Amor (K), Mateo Romeo (PJ) y Daniel Amoroso, y las abstenciones del resto de la oposición, que le facilitaron el trámite, con la oposición del izquierdista Alejandro Bodart.
Es que más de la mitad de la suma solicitada está destina al pago de aumentos de sueldos para los empleados de la administración pública, sindicato que gerencia Amor, médicos y maestros.
En ese rubro no hubo opositores pero sí en el resto de la partida, que se volcará a subsidiar la tarifa del viaje en subte, obras en ese transporte, aumentos en el precio de la recolección de residuos y, entre otros ítems, la financiación de un relleno sanitario.
También, el Gobierno porteño incluyó un aumento de dinero para el área de salud destinado a insumos hospitalarios, subsidio a las víctimas de Cromañón, y obras de bacheo y tránsito.
De esa manera el Gobierno de la Capital incorporará al presupuesto que está vigente $ 5.598 millones provenientes de la estimación del incremento de la recaudación tributaria por encima de la previsión que detalló en 2012, cuando se aprobó la ley de presupuesto para el actual ejercicio.
Allí no se incluyó ninguna previsión de aumentos salariales, una mecánica que el PRO repite cada período para esperar el resultado de las paritarias.
La ampliación presupuestaria se completa, según las explicaciones del PRO, con el ingreso de $ 414 millones adicionales en un recálculo de gastos, y prevé la incorporación de $ 1.125 millones provenientes de la disminución de otros activos financieros.
Desde el kirchnerismo, la legisladora María José Lubertino expuso las razones del bloque para no apoyar la medida, sosteniendo que era "necesario conocer detalladamente el porcentaje y los montos de las renegociaciones y redeterminaciones que corresponden a salarios" y reuniones "para determinar prioridades sobre los gastos". De la Coalición Cívica, Rocío Sánchez Andía consideró que "el expediente en cuestión ha ingresado a la Legislatura el 10 de junio y se está despachando el 19 de junio sin pasar por reuniones de asesores y con apenas dos reuniones de diputados en las cuales no se han evacuado todas las dudas".
El PRO consiguió adhesiones para esa norma y también tuvo, en la sesión ordinaria de la Legislatura porteña, los votos justos para el pedido de ampliación presupuestaria que formuló Mauricio Macri por más de $ 7.000 millones.
El freno a la suba del ABL es para 2014 y el PRO lo impulsó para evitar un trago amargo durante la temporada electoral, ya que los cálculos se realizan este año, y además una baja de adherentes en el preludio de las elecciones presidenciales de 2015. En el ejercicio anterior hubo fuertes críticas al impuestazo del Gobierno porteño, que llevó las boletas de ABL al doble en muchos casos.
Aumentos habrá igual, pero las propiedades más caras no pagarán una suba superior al 40% de acuerdo con la ley.
En la Ciudad rige desde 2011 una norma que actualiza cada año automáticamente el ABL con el propósito de llevar la base imponible, que es la valuación fiscal, hasta el 80% del precio de mercado de la propiedad.
Si la ley se aplicaba como está previsto, las subas serían del 50%, 75% y 100% según el valor de la propiedad, pero ahora se frenarán al 20%, el 30% y el 40%, según la valuación sea de $ 150 mil para el primer tramo, $ 300 mil para el segundo y para el tercero las que superen ese valor. La norma contó con 47 votos positivos.
En cambio, el macrismo llegó a reunir apenas lo justo, 30 votos, que significaron mayoría para otorgarle a Macri más presupuesto con recursos de la coparticipación y de mayor recaudación. El PRO contó con la adhesión en el recinto deAlejandro Amor (K), Mateo Romeo (PJ) y Daniel Amoroso, y las abstenciones del resto de la oposición, que le facilitaron el trámite, con la oposición del izquierdista Alejandro Bodart.
Es que más de la mitad de la suma solicitada está destina al pago de aumentos de sueldos para los empleados de la administración pública, sindicato que gerencia Amor, médicos y maestros.
En ese rubro no hubo opositores pero sí en el resto de la partida, que se volcará a subsidiar la tarifa del viaje en subte, obras en ese transporte, aumentos en el precio de la recolección de residuos y, entre otros ítems, la financiación de un relleno sanitario.
También, el Gobierno porteño incluyó un aumento de dinero para el área de salud destinado a insumos hospitalarios, subsidio a las víctimas de Cromañón, y obras de bacheo y tránsito.
De esa manera el Gobierno de la Capital incorporará al presupuesto que está vigente $ 5.598 millones provenientes de la estimación del incremento de la recaudación tributaria por encima de la previsión que detalló en 2012, cuando se aprobó la ley de presupuesto para el actual ejercicio.
Allí no se incluyó ninguna previsión de aumentos salariales, una mecánica que el PRO repite cada período para esperar el resultado de las paritarias.
La ampliación presupuestaria se completa, según las explicaciones del PRO, con el ingreso de $ 414 millones adicionales en un recálculo de gastos, y prevé la incorporación de $ 1.125 millones provenientes de la disminución de otros activos financieros.
Desde el kirchnerismo, la legisladora María José Lubertino expuso las razones del bloque para no apoyar la medida, sosteniendo que era "necesario conocer detalladamente el porcentaje y los montos de las renegociaciones y redeterminaciones que corresponden a salarios" y reuniones "para determinar prioridades sobre los gastos". De la Coalición Cívica, Rocío Sánchez Andía consideró que "el expediente en cuestión ha ingresado a la Legislatura el 10 de junio y se está despachando el 19 de junio sin pasar por reuniones de asesores y con apenas dos reuniones de diputados en las cuales no se han evacuado todas las dudas".