para Ambito Financiero
La audiencia pública para debatir las condiciones de los nuevos contratos de recolección de residuos para la Ciudad de Buenos Aires se realizó ayer, con opositores al PRO y representantes de ONG anotados para dar su opinión. Ahora el Gobierno porteño asegura que intentará incorporar en los pliegos de licitación sugerencias que se vertieron en el microcine del Centro Cultural Recoleta, espacio que resultó pequeño para la cantidad de asistentes.
El debate lo encabezó el ministro de Ambiente y Espacio Público, Diego Santilli, quien mostró gran conformidad por el resultado y aseguró que se considerarán algunas propuestas. Especialmente Santilli aclaró que el servicio que se dará en concesión es la recolección de los residuos llamados húmedos, mientras que de los desperdicios reciclables -como cartones y papeles- se ocuparán distintas cooperativas de recuperadores.
La oposición, entre ellos los legisladores María José Lubertino y Alejandro Bodart, debieron reconocer mejoras con respecto a los contratos actuales, hubo críticas en algunos aspectos. Por ejemplo al precio que se pagará, a la recolección en villas de emergencia que contará con un servicio especializado y también con respecto a la instalación de contenedores.
Bodart expuso que el costo de la recolección por cuadra en la zona a cargo del Ente público de Higiene es de $ 53.907 mientras que las empresas privadas cobran más del doble.
Santilli explicó que la diferencia es porque los recolectores privados -gremio camioneros- tienen sueldo más alto que los empleados municipales.
Por su parte el legislador Julio Raffo (Proyecto Sur) estimó que «hay que cambiar la lógica del negocio de la basura. No se puede tropezar siempre con la misma piedra», en relación con la empresa concesionaria.
También opinó una comunera, Julieta Costa Díaz (Partido Socialista Auténtico) diciendo que «el nuevo pliego de Higiene Urbana del PRO le saca a las empresas la responsabilidad de rendir cuentas ante los vecinos y las vecinas de la Ciudad».
Para Lubertino «sigue siendo un problema estructural de este pliego que no aparezca una coordinación clara entre recolección de residuos y recolección de sólidos. No hay cambio de conciencia en la lógica del sistema, no se pasa a una cultura de la no generación de residuos, a una cultura del no enterramiento».
Santilli consideró «muy satisfactoria» la audiencia y aseguró que «desde 2010 estamos trabajando en este proceso. Hemos hecho un trabajo importante. Hubo dos audiencias públicas, donde, además, todas las ONG han trabajado para enriquecer y mejorar el pliego».
Los nuevos contratos se otorgarán por 10 años y la recolección se hará todos los días de la semana: El actual contrato se hizo por 4 años y se viene prorrogando, con obligación de realizar la limpieza de domingos a viernes.
Protesta de Greenpeace - 2010 |
La audiencia pública para debatir las condiciones de los nuevos contratos de recolección de residuos para la Ciudad de Buenos Aires se realizó ayer, con opositores al PRO y representantes de ONG anotados para dar su opinión. Ahora el Gobierno porteño asegura que intentará incorporar en los pliegos de licitación sugerencias que se vertieron en el microcine del Centro Cultural Recoleta, espacio que resultó pequeño para la cantidad de asistentes.
El debate lo encabezó el ministro de Ambiente y Espacio Público, Diego Santilli, quien mostró gran conformidad por el resultado y aseguró que se considerarán algunas propuestas. Especialmente Santilli aclaró que el servicio que se dará en concesión es la recolección de los residuos llamados húmedos, mientras que de los desperdicios reciclables -como cartones y papeles- se ocuparán distintas cooperativas de recuperadores.
La oposición, entre ellos los legisladores María José Lubertino y Alejandro Bodart, debieron reconocer mejoras con respecto a los contratos actuales, hubo críticas en algunos aspectos. Por ejemplo al precio que se pagará, a la recolección en villas de emergencia que contará con un servicio especializado y también con respecto a la instalación de contenedores.
Bodart expuso que el costo de la recolección por cuadra en la zona a cargo del Ente público de Higiene es de $ 53.907 mientras que las empresas privadas cobran más del doble.
Santilli explicó que la diferencia es porque los recolectores privados -gremio camioneros- tienen sueldo más alto que los empleados municipales.
Por su parte el legislador Julio Raffo (Proyecto Sur) estimó que «hay que cambiar la lógica del negocio de la basura. No se puede tropezar siempre con la misma piedra», en relación con la empresa concesionaria.
También opinó una comunera, Julieta Costa Díaz (Partido Socialista Auténtico) diciendo que «el nuevo pliego de Higiene Urbana del PRO le saca a las empresas la responsabilidad de rendir cuentas ante los vecinos y las vecinas de la Ciudad».
Para Lubertino «sigue siendo un problema estructural de este pliego que no aparezca una coordinación clara entre recolección de residuos y recolección de sólidos. No hay cambio de conciencia en la lógica del sistema, no se pasa a una cultura de la no generación de residuos, a una cultura del no enterramiento».
Santilli consideró «muy satisfactoria» la audiencia y aseguró que «desde 2010 estamos trabajando en este proceso. Hemos hecho un trabajo importante. Hubo dos audiencias públicas, donde, además, todas las ONG han trabajado para enriquecer y mejorar el pliego».
Los nuevos contratos se otorgarán por 10 años y la recolección se hará todos los días de la semana: El actual contrato se hizo por 4 años y se viene prorrogando, con obligación de realizar la limpieza de domingos a viernes.