Sin duda, el proyecto de soterramiento del ferrocarril Sarmiento, que corre por la avenida Rivadavia, cambiará el paisaje porteño, integrando los barrios y, si no se transforma meramente en el aprovechamiento de tierras nuevas para la especulación imobiliaria, le dará a la ciudad de Buenos Aires espacios verdes que necesita.El gobierno nacional ya tiene prevista la construcción aledaña de viviendas que está otorgando dentro del plan Pro.cre.ar.
por Patricia García
para Ambito Financiero
Se trata de cinco emprendimientos en los barrios de Palermo, Caballito, Liniers, Pompeya y Parque Patricios, de acuerdo con la iniciativa que presentó el interbloque K con la firma de Juan Cabandié, Aníbal Ibarra yGabriela Cerruti. La aprobación no tendría mayor demora que el mismo trámite que requiere este tipo de leyes, que incluyen la realización de audiencias públicas y una doble lectura, porque los votos ya los tendría garantizados el kirchnerismo.
Pero el macrismo no será gentil sin nada a cambio en un año en el cual la actividad legislativa estuvo prácticamente trabada por los enfrentamientos del oficialismo porteño (que es PRO) con el kirchnerismo. Así, el bloque que responde a Mauricio Macri se asegura contar con los votos para un pedido de endeudamiento por más de u$s 200 millones para pagar una flota de vagones nuevos y modernos para la línea H del subterráneo.
Sería una excepción que los K aceptaran que Macri tome una deuda semejante. La sorpresa, sin embargo, vendrá por otro lado, cuando se desempolve el proyecto Solares de Santa María que hace años es rechazado en la Legislatura.
Para poder construir en las tierras que administraba la ONABE, dentro de los límites de la Ciudad de Buenos Aires, el Gobierno nacional necesita que la Legislatura porteña apruebe cambios de zonificación donde corresponda, pero además, la cesión de una parte importante de los terrenos al distrito. Ésa es una norma en la Ciudad, que impone que debe cederse el 65% de la superficie, que se utilizará para apertura de calles y plazas.
Los proyectos son dos: uno para los barrios del sur y el otro para Caballito, Palermo y Liniers. El Gobierno nacional mediante el decreto 1.723 desafectó los inmuebles del uso ferroviario para su urbanización. En esa norma, que cita la iniciativa ingresada a la Legislatura -y a la cual tuvo acceso este diario- se indica que «dichos inmuebles ubicados en los barrios de Caballito, Palermo y Liniers, una vez refuncionalizados y puestos en valor», no sólo lograrán «la plena integración urbana» sino que por su ubicación y potencial «podría implicar un ingreso aproximado equivalente al 25% de la inversión directa necesaria para la realización de las obras de soterramiento del Ferrocarril Sarmiento».
Las hectáreas que se destinarán al Pro.Cre.Ar, son linderas a las vías del ferrocarril en las estaciones Liniers y Caballito y en el eje Juan B Justo en Palermo.
Luego, el proyecto K señala que el Gobierno nacional ha dispuesto la cesión a la Ciudad de Buenos Aires «de la superficie que será destinada a la creación de nuevos espacios verdes, paliando así una significativa necesidad urbanística» y dando cumplimiento al Plan Urbano Ambiental de la Capital Federal.
En Palermo, de acuerdo con la iniciativa, se destinarán 5 hectáreas para espacio verde y el resto se transformará en una zona residencial incorporando al conjunto el predio ex Bodegas Giol.
Altura máxima
Otra característica es que los edificios que se construyan no tendrían una altura mayor a los 24 metros, es decir serían de unos nueve pisos y que se abrirá la calle Costa Rica en Palermo y en Caballito las calles Bogotá y Bacacay.
En Liniers, del mismo modo se destinará un área para parque, pero tendrá la particularidad de conformar en una zona que es de protección patrimonial, un área de «protección ambiental en la cual se encuentran ubicados los edificios conocidos como «Talleres Liniers».
El otro proyecto de ley es para las estaciones Sáenz Peña y la Buenos Aires, que promete un espacio verde «en el corazón de los barrios de Parque Patricios-Pompeya».
