por Patricia García para
Buenos Aires Me Quiere
El cierre de la tradicional confitería Richdmon para transformarse en un negocio de venta de zapatillas, alertó a los amantes de la conservación. También descubrió que algunas catalogaciones no son útiles para preservar el patrimonio de la Ciudad de Buenos Aires. Es el caso de la Richmond, nominana “bar notable”. Pero a Florida le pasa mucho más que la pérdida de un lugar característico con todo el peso de su historia. La peatonal Florida es diferente en fotos que caminando por ella. Para empezar, el paisaje se va devaluando de norte de a sur. La coqueta zona a metros de la Plaza San Martín, ya no tiene nada que ver con la Florida que llega a la avenida Rivadavia.
Buenos Aires Me Quiere
Calle Florida, 1969, aún no era peatonal . Foto AGN |
El cierre de la tradicional confitería Richdmon para transformarse en un negocio de venta de zapatillas, alertó a los amantes de la conservación. También descubrió que algunas catalogaciones no son útiles para preservar el patrimonio de la Ciudad de Buenos Aires. Es el caso de la Richmond, nominana “bar notable”. Pero a Florida le pasa mucho más que la pérdida de un lugar característico con todo el peso de su historia. La peatonal Florida es diferente en fotos que caminando por ella. Para empezar, el paisaje se va devaluando de norte de a sur. La coqueta zona a metros de la Plaza San Martín, ya no tiene nada que ver con la Florida que llega a la avenida Rivadavia.
Muchas fachadas han desaparecido para
transformarse en enormes cortinas metálicas que, cuando se suben
exhiben galpones de venta de ropa...
Caminando se pisan las baldosas flojas, las baldosas mal reparadas y el pozo que aparece y desaparece a metros de la avenida Corrientes sobre la mano derecha en dirección al sur.
Caminando se pisan las baldosas flojas, las baldosas mal reparadas y el pozo que aparece y desaparece a metros de la avenida Corrientes sobre la mano derecha en dirección al sur.
Ex Confitería Richmond, en litigio por su conservación |
Florida, concentración permanente de
turistas, está devaluada y se está convirtiendo en una mala
vidriera de la ciudad de Buenos Aires. Un plan integral de
recuperación, con normas adecuadas y posibles de cumplir podría
frenar el deterioro. Un poco de limpieza, tampoco vendría mal y algo
de armonía y estética que, por ejemplo sintonice con el primer
paseo cerrado de la ciudad, la Galería Guemes.