Gabriela Michetti |
para Ambito Financiero
Resistente a todas las técnicas de convencimiento que hasta ahora se le presentaron, Gabriela Michetti pasará la última prueba para ver si logra sostener su decisión de ser candidata a senadora por la Ciudad de Buenos Aires -tal como anticipó este diario- y no postularse en tierra bonaerense en las elecciones del año próximo.
Ese test lo hará frente a frente y a solas, según está previsto, con Mauricio Macri, el miércoles. Los espera una mesa a la hora de la cena para intercambiar opiniones y certezas. De llegar a un acuerdo, no se espera que el jefe de Gobierno lo comunique ya que hay varios aspirantes en el PRO y Macri anima que vayan a las urnas, oportunidad que darán la Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias nacionales.
Apuesta
Michetti está decidida a no ser candidata en la provincia de Buenos Aires, pero también redobla la apuesta diciendo que si eso genera «mucha molestia» dentro del PRO, dejaría pasar dos años sin banca para regresar en 2015 a la competencia mayor de la Ciudad, cuando Macri deje el cargo de jefe de Gobierno.
Con esas certezas le deja poco a Macri para que logre convencerla de que lo mejor para su carrera presidencial sería que ella encabezara una tira bonaerense para intentar que el PRO obtenga un resultado visible en la geografía de Daniel Scioli.
Hasta ahora, en el interior de su agrupación, más que aliados en su cruzada, la diputada provocó una lista de disgustados. La encabezaría el jefe de Gabinete porteño, Horacio Rodríguez Larreta, quien aspira a ser él quien encabece la tira a senadores por la Ciudad de Buenos Aires el año próximo, como parada previa a disputar el sillón de Macri en 2015. Marcos Peña es otro en el entorno, a quien la decisión que le trasmitió la diputada causó un enojo mayor. Emisario de ese intercambio, el secretario general del gobierno PRO trasmitió la situación a Macri. El ministro de Gobierno, Emilio Monzó, armador de la estrategia electoral del jefe porteño, aún cree que cuenta con tiempo para convencer a la diputada, al punto de que para los próximos días está previsto un acto, en la provincia de Buenos Aires, postulando a Michetti, como parte de un operativo que hace tiempo comenzó.
El propio ministro Guillermo Montenegro, aliado a Michetti, no tendría la mejor sonrisa, ya que buscará postularse en San Isidro y esperaba hacerlo atado a una boleta que encabezara la exvicejefa porteña.
Interés
Para Humberto Schiavone, titular del PRO, aún falta. Como sea, el miércoles, si los planes no los alteran ni Macri ni Michetti, la cena prevista se transformará en la cita que más interés despierta en el macrismo. Después de esa definición comenzará la verdadera interna que nunca vivió la agrupación de Macri, más acostumbrada a la lapicera y a acatar los consejos deJaime Durán Barba. El asesor ecuatoriano es otro que recibió con disgusto la noticia, aunque contradictorio, ya que según explicó en un plenario del PRO, para él las elecciones de 2013 no son tan importantes para el posicionamiento del jefe porteño como postulante presidencial. Una porción de legisladores y diputados del PRO tampoco considerará acertado que Michetti reniegue del mandato partidario y no haga un nuevo «sacrificio», como cuando renunció a la vicejefatura de Gobierno para ser candidata a diputada nacional.
El año que viene a la exfuncionaria se le termina el mandato, por eso ya tiene decidido que «si se arma mucho lío», dejará pasar el turno y se quedará sin banca con la idea de armar su propia campaña como candidata a jefa de Gobierno, lo que incomodaría en ese punto a María Eugenia Vidal, entre otros, claro.
Federico Pinedo sería el compañero de fórmula para la senaduría, mientras que otro que quiere postularse es el ministro de Espacio Público, Diego Santilli. Todo dependerá de lo que logre Macri pasado mañana. Si Michetti es bendecida para no mudarse de distrito, habrá que ver con cuánto apoyo interno contará para esa campaña, que en principio se dirimirá en las internas abiertas.
Ese test lo hará frente a frente y a solas, según está previsto, con Mauricio Macri, el miércoles. Los espera una mesa a la hora de la cena para intercambiar opiniones y certezas. De llegar a un acuerdo, no se espera que el jefe de Gobierno lo comunique ya que hay varios aspirantes en el PRO y Macri anima que vayan a las urnas, oportunidad que darán la Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias nacionales.
Apuesta
Michetti está decidida a no ser candidata en la provincia de Buenos Aires, pero también redobla la apuesta diciendo que si eso genera «mucha molestia» dentro del PRO, dejaría pasar dos años sin banca para regresar en 2015 a la competencia mayor de la Ciudad, cuando Macri deje el cargo de jefe de Gobierno.
Con esas certezas le deja poco a Macri para que logre convencerla de que lo mejor para su carrera presidencial sería que ella encabezara una tira bonaerense para intentar que el PRO obtenga un resultado visible en la geografía de Daniel Scioli.
Hasta ahora, en el interior de su agrupación, más que aliados en su cruzada, la diputada provocó una lista de disgustados. La encabezaría el jefe de Gabinete porteño, Horacio Rodríguez Larreta, quien aspira a ser él quien encabece la tira a senadores por la Ciudad de Buenos Aires el año próximo, como parada previa a disputar el sillón de Macri en 2015. Marcos Peña es otro en el entorno, a quien la decisión que le trasmitió la diputada causó un enojo mayor. Emisario de ese intercambio, el secretario general del gobierno PRO trasmitió la situación a Macri. El ministro de Gobierno, Emilio Monzó, armador de la estrategia electoral del jefe porteño, aún cree que cuenta con tiempo para convencer a la diputada, al punto de que para los próximos días está previsto un acto, en la provincia de Buenos Aires, postulando a Michetti, como parte de un operativo que hace tiempo comenzó.
El propio ministro Guillermo Montenegro, aliado a Michetti, no tendría la mejor sonrisa, ya que buscará postularse en San Isidro y esperaba hacerlo atado a una boleta que encabezara la exvicejefa porteña.
Interés
Para Humberto Schiavone, titular del PRO, aún falta. Como sea, el miércoles, si los planes no los alteran ni Macri ni Michetti, la cena prevista se transformará en la cita que más interés despierta en el macrismo. Después de esa definición comenzará la verdadera interna que nunca vivió la agrupación de Macri, más acostumbrada a la lapicera y a acatar los consejos deJaime Durán Barba. El asesor ecuatoriano es otro que recibió con disgusto la noticia, aunque contradictorio, ya que según explicó en un plenario del PRO, para él las elecciones de 2013 no son tan importantes para el posicionamiento del jefe porteño como postulante presidencial. Una porción de legisladores y diputados del PRO tampoco considerará acertado que Michetti reniegue del mandato partidario y no haga un nuevo «sacrificio», como cuando renunció a la vicejefatura de Gobierno para ser candidata a diputada nacional.
El año que viene a la exfuncionaria se le termina el mandato, por eso ya tiene decidido que «si se arma mucho lío», dejará pasar el turno y se quedará sin banca con la idea de armar su propia campaña como candidata a jefa de Gobierno, lo que incomodaría en ese punto a María Eugenia Vidal, entre otros, claro.
Federico Pinedo sería el compañero de fórmula para la senaduría, mientras que otro que quiere postularse es el ministro de Espacio Público, Diego Santilli. Todo dependerá de lo que logre Macri pasado mañana. Si Michetti es bendecida para no mudarse de distrito, habrá que ver con cuánto apoyo interno contará para esa campaña, que en principio se dirimirá en las internas abiertas.